He podido leer que en las carreras como el periodismo o la comunicación imparten materias que enseñan actitudes como el ser objetivo e imparcial, sin involucrarse porque se considera poco profesional además de que podría volverse algo personal.
En la actualidad los medios compiten entre sí para conseguir la información antes que el resto, sus competidores. Esto lleva a los fotógrafos a mostrar un lado más frívolo y superficial por la rapidez con la que se tiene que alcanzar imágenes de un suceso. Quien tenga la mejor fotografía antes será recompensado con un trabajo bien hecho y será reconocido entre lectores y los medios de comunicación.
Paul Hansen fotografió a una niña de 15 años tras el terremoto en Haití. Fue asesinada por policías al ser confundida con saqueadores tiendas.
Nathan Weber sin embargo decidió tomar la misma fotografía pero desde otro punto de vista. Fotografió el cadáver de la niña de 15 años junto a los fotógrafos realizando su toma.
Dos imágenes muy distintas que muestran diferentes puntos de vista éticos. Mientras que en la fotografía de Paul Hansen puedes pensar el horror en el que están viviendo sus vidas los ciudadanos de Haití, la locura que desencadena los saqueos, los policías dispararan sin sentido ni si quiera se paran a pensar lo que está haciendo la gente, de donde vienen y hacia donde se dirigen, etc. La fotografía de Nathan Weber muestra una visión de la humanidad fría, los fotógrafos disparando sus cámaras hacía la niña tirada en el suelo como si de un escaparate o expositor se tratase.
Otro de los fotógrafos a los que quería mencionar es Kevin Carter. Este fotógrafo gano el premio World Press Photo de una fotografía muy polémica, tan polémica que hizo que el fotógrafo se suicidara tras la multitud de críticas que recibió. El niño aparece tumbado en el suelo boca abajo mientras un águila le observa fijamente.
Enrique Metinides es un fotógrafo mexicano que desde muy niño se dedicó a fotografiar accidentes, tiroteos, asesinatos, etc. Una de sus tantas fotografías es muy reconocida.Se trata de una imagen donde aparece una mujer en la que el cuenta la historia. Es una periodista que hacía libros y la tarde del accidente iba a realizar una presentación de un nuevo libro con la fatalidad de que se cruzó en su camino un accidente entre dos coches y quedó prensada contra un poste. En la imagen la mujer aparece toda arreglada con los ojos abiertos, ni si quiera parece que estuviera muerta.
Enrique Metinides tenia la curiosidad de fotografiar la reacción de la gente frente a una situación crítica, de horror. Fotografiaba el morbo que producía a la gente este tipo de acontecimientos.
¿Realmente se ha convertido la fotografía de periodismo social en una competición?¿Es más el interés de ganar dinero por ser el primero en mostrar una fotografía de un suceso y optar a un premio o mostrar la realidad de los acontecimientos?
Un fotógrafo se juega la vida si se encuentra en una guerra, objetivamente es complejo dar una opinión si hoy en día se hace por dinero o por humanidad el mostrar los desastres. Al fin y al cabo es una profesión que se ha elegido y sienten la necesidad de hacer llegar y concienciar al resto de ciudadanos lo que ocurre en otros lugares.
¿En el caso de Kevin Carter era necesario llevarlo al suicidio? Un fotógrafo que muestra lo que está ocurriendo en el mundo para concienciar y la sociedad se dedica a finalizar su vida. ¿Es una manera egoísta de no querer ver lo que pasa en el resto del mundo mientras nosotros vivimos como reyes?
Resulta curioso acusar a una persona de no ayudar al niño de la fotografía y al mismo tiempo llevar a la persona al suicidio.
Estamos tan acostumbrados a ver imágenes de las guerras que ya ni si quiera le damos importancia, pensamos vah! esta gente está acostumbrada a la guerra, llevan toda la vida. Sin embargo vemos un atentado en Europa o que nos pilla de cerca y nos sentimos alarmados. ¿No deberíamos sentir la misma alarma aunque sea en un país mas lejano? Las personas no dejan de ser personas, habría que acabar con la locura de las guerras, los trastornos de la gente de matar por matar.
Y mientras los más desfavorecidos se matan entre ellos, los altos cargos son capaces de intercambiar palabras con sus enemigos.
ResponderEliminarBuena reflexión Ross,
Tendrías que corregir algunas cositas de redacción como:
"EL (El) fotógrafo se encarga de captar momentos, momentos que en determinadas ocasiones resultan poco o nada éticos para el mundo (aquí tendría que ir un punto) fotografiar y no intervenir."
¿Realmente se ha convertido la fotografía de periodismo social en una competición? (Aquí no has puesto espacios, en alguna otra ocasión te ocurre que no pones espacio entre el punto y la frase siguiente, ten cuidado. ¿Es más el interés de ganar dinero por ser el primero en mostrar una fotografía de un suceso y optar a un premio o mostrar la realidad de los acontecimientos?
Kevin Carter gano (ganó)
Dices: "Pensamos vah!", cuando debería ser "Pensamos, ¡bah!"